“RSE y sus mitos. Manual básico para refutar a ingenuos y escépticos“. La publicación, del autor Lucas Utrera, se basa en los imaginarios que hay en torno a la Responsabilidad Social Empresarial y las frases que habitualmente se escuchan al abordar el tema, además de clarificar conceptos que muchas veces se dan por entendidos de manera errónea. Al mismo tiempo, intenta desmitificar de una manera graciosa, dando una bajada conceptual de casos y experiencias.
El libro cuenta con prólogo de Carlos March (Fundación Avina) y está disponible en Cúspide, Ateneo y demás librerías. También se puede encontrar en la web de EDICON y, en breve, se podrá acceder a la versión ebook.
Algunas frases del autor:
“La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) son las donaciones que hace una empresa”. “La RSE es un mecanismo para desgravar impuestos”. “La RSE es una estrategia de Marketing de las empresas”. Estas afirmaciones son sólo algunas de las muchas que se escuchan de manera recurrente desde hace varios años. Se afirman con énfasis en directorios de empresas, ámbitos políticos, conferencias, seminarios, escuelas de negocios y universidades. Ante la simple pregunta “¿en base a qué?” Las respuestas, si aparecen, son bastante precarias, la mayoría de las veces, meras percepciones.
Este libro pretende refutar esos mitos e imaginarios parciales sobre el mundo de los negocios a través de desarrollos conceptuales y experiencias empresariales que permitirán, al mismo tiempo, la reflexión y el estudio del verdadero significado de la RSE. Lejos está el propósito de generar un grupo de refutadores de leyendas necios y racionales. En todo caso, la intención es elevar el nivel de discusión de estos temas apasionantes e inevitables. Porque las empresas son actores relevantes en el debate y en las resoluciones de problemáticas como el cambio climático, el cuidado de los recursos naturales y el combate a la pobreza, en un mundo cada vez más complejo, asimétrico y poblado, que presenta un desafío esencial: cómo lograr para 2050 que nueve mil millones de personas puedan vivir bien en este único planeta.
En definitiva, la RSE no es el “cuento del tío” que pregonan los escépticos, tampoco el “cuento romántico de hadas” que relatan los ingenuos, tan sólo se trata de una forma de concebir los negocios a partir de las contribuciones de las empresas al desarrollo sustentable. Entonces, que la RSE sea justamente eso: un modelo de gestión empresarial; decisiones y acciones, con sus aciertos, errores y (des)aprendizajes, que le permitan a una empresa incorporar variables sociales y ambientales en sus negocios. Y esto no es un camino fácil, pero lejos está de ser un mito.
VIA /COMUNICARSE